Reconocer. Comprender. Cambiar.
Prevención
Un enfoque multidisciplinar y comunitario es clave para reducir la incidencia de los trastornos de la conducta alimentaria y mejorar la calidad de vida de quienes están en riesgo.

Enfoque de los Programas de Prevención de Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA)
Prevención Primaria
Antes de que aparezca el problema
Promover hábitos de alimentación equilibrados y saludables, sin restricciones extremas.
Educar sobre la influencia de los medios de comunicación y las redes sociales en la percepción del cuerpo.
Fomentar el pensamiento crítico frente a los estándares de belleza irreales.
Trabajar en la autoestima y la gestión emocional para evitar que la insatisfacción personal derive en un TCA.
Prevención Secundaria
Detección temprana y actuación rápida
Capacitar a docentes, familias y profesionales de la salud para identificar signos de alerta.
Ofrecer espacios de escucha y apoyo para jóvenes que muestran preocupaciones excesivas por el peso o la alimentación.
Realizar evaluaciones periódicas en centros educativos para detectar posibles casos en fases iniciales.
Prevención Terciaria
Evitar recaídas en personas en tratamiento o en recuperación
Mantener seguimiento psicológico y nutricional a largo plazo.
Crear grupos de apoyo para compartir experiencias y estrategias de afrontamiento.
Sensibilizar a las familias para que brinden un entorno libre de presiones estéticas y dietas restrictivas.
Trabajemos juntos en tu futuro.
Si estás preparado para dar el primer paso en una nueva dirección, ponte en contacto con nosotros
Te guiaremos y apoyaremos para que desarrolles nuevos caminos y mejores tu calidad de vida.
